Descúbrelo todo sobre los distintos tipos de cierre de pendientes

¿Te has preguntado alguna vez por qué hay varios tipos de cierre de pendientes en joyería? La respuesta simple: cada cierre tiene unas características únicas que permiten que los pendientes se adapten a la forma de tu oreja y puedas llevarlos con comodidad.

Los pendientes son una de las joyas más utilizadas debido a su gran versatilidad. Puedes llevar unos sencillos pendientes de plata pegados a la oreja en tu día a día, ponerte un piercing de oro o estar deslumbrante con unos pendientes de diamantes.

Pero, como es obvio, no todos los pendientes son iguales. Unos pendientes de botón de oro no tienen nada que ver con unos unos aros de plata, por ejemplo. Y además del diseño y el material del que están hechos también hay que tener en cuenta cómo es su cierre a la hora de decidir qué pendientes son los adecuados para ti. ¡Echa un vistazo a las opciones disponibles!

Pendientes con cierre de clip

No tener hechos los agujeros de las orejas no es impedimento para lucir unos hermosos pendientes. El cierre de pellizco se sujeta directamente a lóbulo de la oreja gracias a la presión de su mecanismo. El mayor inconveniente de este tipo de cierre es que puede abrirse fácilmente por lo que se multiplican las posibilidades de perder los pendientes.

Cierre a presión con rosca

Es una variante del cierre de presión que incluye un pequeño rosca en el pasador para un mayor nivel de seguridad. La rosca evita que el pendiente se suelte fácilmente.

Cierre de palanca

Este cierre tiene una pequeña palanca que se desliza hacia atrás y hacia adelante para abrir y cerrar el pendiente. Es una opción segura y fácil de usar.

Cierre de gancho francés o cierre hippie

Este cierre es muy simple ya que estamos ante un gancho curvado que se introduce sin más en el agujero de la oreja y se mantiene en su sitio gracias a la gravedad. Si te da miedo que el pendiente se caiga con el movimiento lo único que tienes que hacer es ponerte un tornillo de silicona aunque en ese caso estaríamos ante un cierre romano.

Cierre de presión con gancho

Combina las características de un cierre de presión con las de un gancho francés. El pasador se asegura en su lugar con una placa que se presiona, y luego el gancho se engancha en el lóbulo de la oreja para mayor seguridad.

Cierre de aro

Los pendientes de aro tienen un cierre que es un aro continuo que pasa a través del lóbulo de la oreja y se cierra en su lugar. Puede variar en tamaño y estilo.

Cierre magnético

Utiliza imanes para mantener los pendientes en su lugar. Son fáciles de poner y quitar, pero pueden no ser tan seguros como otros tipos de cierres.

Cierre de presión invisible

Este tipo de cierre utiliza un pequeño imán o un sistema de encaje que queda oculto detrás del lóbulo de la oreja, creando un aspecto limpio y sin cierres visibles.

Pendientes con cierre de mariposa

Los pendientes con cierre de presión o de mariposa son los más populares porque esta clase de cierre es el que mejor se ajusta a la oreja. Cuando introduces el espigo en la tuerca puedes apretar el pendiente más o menos dependiendo de la sujeción que necesites. Este cierre proporciona un equilibrio excelente entre seguridad y confort aunque está especialmente indicado para pendientes pequeños y ligeros.

Pendientes con cierre de tornillo

Un cierre de tuerca o de tornillo se compone de una pieza metálica en forma de tuerca que se atornilla en la parte posterior del pasador del pendiente, manteniéndolo en su lugar.

Pendientes con cierre omega

En los pendientes con cierre omega se introduce el espigo en el agujero de la oreja y se ajusta por detrás con una especie de barra que tiene la forma de la letra omega del alfabeto griego. Este cierre soporta muy bien el peso del pendiente por lo que es estupendo para joyas de mayor tamaño.

Pendientes de cierre catalán o de ballesta

El conocido como cierre catalán es una variante de los cierres a presión que incorpora un gancho en una de sus partes. Al igual que ocurre con los pendientes de tornillo o con cierre mariposa se ajustan bien y es muy difícil que acaben abriéndose por accidente.

Cierre africano

Podemos ver el cierre africano en los pendientes de aro. Hay una barra fina que se introduce en la oreja y encaja con la otra parte del pendiente para así poder formar el círculo completo. Debes ajustarlo muy bien para que no se abra sin que te des cuenta.

Ahora que ya has visto cuántos tipos de cierre de pendientes hay seguro que te resultará más fácil escoger el que más te guste. Lo importante es sentir que el pendiente permanece en su sitio y no tener que preocuparse constantemente por perderlo.